Con la magia y encanto de Mary Poppins, caracterizada por la alumna Helen García, puesta en escena llevada a cabo en la moderna multicancha de la Escuela «Carlos Condell de la Haza», ubicada en el kilómetro 17 del Valle de Lluta, la comunidad educativa, encabezada por su director, Nicolás Montecinos, junto a la directiva del Centro General de Padres y Apoderados, encabezada por su presidenta Andrea Godoy e invitados especiales, inauguraron un sombreadero el que cumple el propósito sobre el refaccionado recinto deportivo.
La iniciativa fue financiada con fondos FNDR, por un total de $ 713 millones de pesos, montos que permitirán favorecer a otros 5 establecimientos del SLEP Chinchorro, como las escuelas: «Rómulo Peña Maturana», «Regimiento Rancagua, Comandante Juan José San Martín», «Ricardo Silva Arriagada» y «Valle de Chaca».
El director también destacó la obra, que posibilitará la realización de múltiples actividades insertas en el currículo del establecimiento, reduciendo los riesgos que implican la exposición permanente a los rayos solares y sus consecuencias en alumnos y docentes “por lo que es una gran alegría contar con este espacio protegido y seguro, para seguir desarrollando diversas actividades, por lo que agradezco al servicio la materialización de esta iniciativa”.
“Es muy importante por lo que significará en la protección de nuestros alumnos, profesores y comunidad en general, en especial cuando hacían actividades físicas, al igual que actividades folklóricas, que forman parte del currículo del establecimiento”, expresó el dirigente de los padres y apoderados.
“La verdad esta era una necesidad de años, ya que había actividades masivas que realizábamos en forma gradual a pleno sol, y, a veces, dependiendo del grado de nubosidad, y entre estas, el Machaq Mara, que es la actividad más importante que llevamos a cabo, lo que nos va a dar protección para hacerla sin los efectos de la radiación solar”, expresó Claudia Olivares, profesora de Lenguaje.
«El financiamiento de sombreaderos se logró gracias a la aprobación en mayo del 2024, por el anterior Consejo y Gobierno Regional, cuyos integrantes estimaron necesario dar respuesta a una necesidad imperiosa de proteger a la comunidad educativa de los establecimientos favorecidos, para evitar la exposición a la radiación ultravioleta e impactos graves en la salud, incluyendo el desarrollo de cáncer de piel, melanoma, enfermedades oculares y reacciones cutáneas anormales», agregó.
Con la instalación de sombreaderos, se estima cubrir una superficie aproximada de 3.978 m2, para abarcar áreas de uso masivo como espacios recreativos o polifuncionales.