La mayoría de los chilenos que ven el Festival de Viña del Mar por televisión y no son residentes de Santiago, no conocían a Jani Dueñas, la standapera que no logró enganchar con el público de la Quinta Vergara que seguramente fueron más por ver a Marc Anthony y David Bisbal.
Y, por lo tanto, renació el denominado “Monstruo”. Su caso recordó otros similares, como el del humorista Ricardo Meruane o la actriz Vanessa Miller. Surgió, además, eso de la ‘vergüenza ajena’. Minutos de ‘trágame tierra’.
La rutina preparada por Jani Dueñas no dio ley, así se decía en la pampa salitrera cuando no había caso con alguien a quien se la daba varias oportunidades y no pasaba nada.
La comediante dijo al final: «No va a cambiar mi vida de forma terrible». La mayoría de los artistas que van al Festival de Viña del Mar han ido porque sí que les cambia la vida artística, por lo más. No, por lo menos.
Y ya manifestó algunas justificaciones: “No fue un error buscar el constante diálogo con el público, sino que sencillamente no pude conectar. Puede que haya una discordancia que ellos esperaban más chistes y el stand up que yo hago es de contar historias, de hacer historias largas, y ahí estuvo nuestra descordinación», apuntó.
Veremos cómo le irá hoy al standapero Mauricio Palma. Actúa después de los “Backsreet Boys”.







