- El conjunto carioca se impuso 1-0 en un partido de trámite aburrido, pero con una jugada clave. En el arranque, el árbitro argentino Darío Herrera y el VAR de Hector Paletta omitieron una tarjeta roja.El equipo del arquero Agustín Rossi igualmente fue mejor y festejó un título muy merecido.
Flamengo, el coloso y popular, es el nuevo campeón de la Copa Libertadores. Otra vez un brasileño en lo más alto de América. En el Monumental de Lima, en un duelo discreto y marcado por una polémica arbitral, el Fla, que tuvo desde el inicio a Agustín Rossi, le ganó 1-0 a Palmeiras con un gol de cabeza de Danilo en el segundo tiempo.
Alzó su cuarta Libertadores y se convirtió en el más ganador de su país. Y fue justa la consagración por lo que realizó en Perú y por lo que hizo a lo largo del año. Ahí estarán masticando bronca los hinchas de Estudiantes y de Racing, que compitieron de igual a igual con los de Río. Incluso los de La Plata llegaron hasta los penales.
Fue aburrido el encuentro porque Flamengo, el que llevó el peso del juego (60 por ciento de posesión), no tuvo demasiadas ideas para vulnerar a la defensa de Palmeiras. Y porque el equipo del portugués Abel Ferreira salió a esperar el rival del rival. O a rezarle a alguna pelota parada con el siempre peligroso Gustavo Gómez, un especialista a la hora de cabecear. Y no encontró ninguna de las dos cosas.
La polémica se terminó de abrir minutos después, cuando se emitieron las repeticiones de la jugada. El patadón quedó al descubierto. También el grosero error de Herrera, ayudado en nada por Paletta.
Flamengo, de todos modos, fue más que Palmeiras, se quedó otra vez con la Libertadores y embolsó 33 millones de dólares. Los equipos de Brasil siguen arrasando. ¿Se podrá cortar la hegemonía en 2026? (Consignado por Clarín)







