La empresa Merkén entrega herramientas a las encargadas de preparar la comida a miles de niños y niñas del país. Higiene, buenas prácticas, sabrosas y excelentes preparaciones están entre los aspectos abordados en las capacitaciones.
La industria de la alimentación escolar cada vez se vuelve más exigente, los estándares son más altos y la nutrición de los niños se vuelve fundamental para su desarrollo, tanto físico como psicológico.
El Programa de Alimentación Escolar de Junaeb se encarga de entregar cada día desayunos, almuerzos y onces, según corresponda, a niños en situación de vulnerabilidad, tanto en colegios municipales como subvencionados. Es por eso, que las manipuladoras de alimentos toman un rol muy importante y deben estar a la vanguardia del tema alimenticio.
La empresa Merkén, que tiene a su cargo la entrega de más de 1.000 raciones de alimentos a escolares de diferentes regiones del país, desde principio de diciembre ha capacitado a más de 5.000 manipuladoras de alimentos. Esto debido a que ellas tienen como misión realizar la comida más rica para los niños, según indican desde la empresa.
“Esta capacitación tiene como principal objetivo mejorar las competencias y habilidades de nuestras tías, que ellas se sientan confiadas con el trabajo que hacen, además de lograr que las preparaciones sean realizadas de igual forma en todas las regiones del país”, explica Claudia Rojas, Jefa de Prevención de Riesgos de Merkén. Agrega que están preparando una nueva capacitación para el personal de bodegas.
Explica que la capacitación, que forma parte de los requerimientos de Junaeb, cuenta con cuatro módulos. El primero, llamado Buenas Prácticas de Manufactura e Inocuidad, entrega herramientas básicas para la obtención de productos seguros para el consumo humano, y pone acento en temas de higiene y manipulación. El segundo módulo llamado Técnicas Culinarias refuerza aprendizajes materias relacionadas con cortes y cocción, entre otros aspectos.
En el tercer módulo, llamado Preparaciones Junaeb, las manipuladoras son instruidas por un chef en las nuevas preparaciones de los menús para los niños y en el manejo de nuevos productos, tales como cochayuyo y choritos. El cuarto módulo Prevención de Riesgos en la Cocina, les permite tomar medidas preventivas para evitar accidentes, enfermedades profesionales y cómo actuar en caso de algún imprevisto.
En las capacitaciones, que durarán hasta enero y entregarán una certificación a las manipuladoras participantes, también participan nutricionistas que responden a las inquietudes de las participantes.
