Hoy sábado 25 de agosto se conmemora el día de la educación Técnico Profesional (TP); una alternativa de desarrollo que se imparte hace 76 años y siembra las bases del desarrollo social.
Este tipo de educación, que agrupa al 40% de la matrícula de alumnos de 3ero y 4to medio, ha permitido brindarles una alternativa de continuidad de estudios y profundizar conocimientos, trayendo como consecuencia la mejora de la oferta técnica y el fortalecimiento de las industrias.
Diversas fuentes indican que existe estrecha relación entre educación y trabajo, y que la formación TP promueve cambios que aseguran un escenario mejor. Hoy, con materias conducentes a títulos como contabilidad, electrónica o programación, miles de jóvenes tienen un mejor porvenir laboral y se emplean en sectores productivos de alta demanda.
Pese a que éstas especialidades han sido una buena forma de ingreso y permanencia en la vida laboral, deben renovarse y ajustarse a los cambios económicos del país.
No es sorpresa que las capacidades y habilidades valoradas sean distintas a las de hace 10 años, y no necesariamente lo que se imparte en liceos lo refleja. ¿Qué incluir en el aprendizaje Técnico-Profesional del siglo XXI? ¿Cómo preparar a los jóvenes para los oficios del mañana? O, dicho de otra manera: ¿dónde buscará la industria a los especialistas para responder a las necesidades del desarrollo económico del país?
La programación es una de las habilidades que más requerirá nuestra fuerza laboral al año 2025 y potenciará a varios sectores económicos del país. Pese a esto, sólo se ha incluido en algunos de establecimientos TP en Chile.
Al estudiar programación, los escolares desarrollan pensamiento crítico, aumentan su capacidad de resolución de problemas y se conectan con el mundo digital, a la vez que ganan la posibilidad de entrar a “las empresas del futuro”.
En Samsung, junto a Fundación País Digital, abogamos y somos partícipes de iniciativas que promueven la programación dentro de los colegios y que ya la han enseñado a más de 2.000 niños. Por esto sabemos que aumentando el número de establecimientos que la imparten, podremos dar una gran oportunidad a los alumnos de casi 950 liceos Técnico Profesional en Chile.
Al saber que la mitad de quienes ingresan a la educación superior optan por un Centro de Formación Técnico Profesional, la educación media TP representa un arma para mejorar la matriz productiva del país y una herramienta para fortalecer la de miles de jóvenes.
Conmemoremos este día con miras a aunar los esfuerzos para que, lo que enseñemos a nuestros jóvenes, represente para ellos una oportunidad real de crecer, un fortalecimiento de la industria y, finalmente, una contribución eficiente al desarrollo económico y social del país.
Por Trinidad Lacámara, gerente de Ciudadanía Corporativa de Samsung Electronics Chile.