Dada la crisis migratoria que enfrenta esta y otras zonas del Norte Grande, el Gobierno anunció ayer una serie de medidas para acompañar a los extranjeros que llegan al país en forma irregular.
El ministro del Interior y Seguridad Pública, Rodrigo Delgado, junto a su par de Desarrollo Social y Familia, Karla Rubilar, viajarán «en los próximos días» a Colchane, Región de Tarapacá, para monitorear implementación de la ayuda humanitaria. Esta última fue anunciada ayer por los ambos secretarios de Estado, junto a la subsecretaria de Saud Pública, Paula Daza, en una actividad en el palacio de La Moneda.
«Vamos a estar en los próximos días con la ministra Rubilar en la zona para poder ver la implementación», dijo Delgado al matinal Mucho Gusto de Mega, donde añadió que durante la mañana un avión de la Fuerza Aérea despegó rumbo a la región con equipamiento. «Muchos dicen por qué no llevamos antes más carabineros o militares, pero los que conocemos Colchane sabemos que necesitan lo mínimo para estar viviendo ahí el día a día», afirmó.
Delgado manifestó conocer de cerca el drama de muchos migrantes, el cual afirmó observar desde su gestión como alcalde de Estación Central, una de las comunas de la RM donde estos se han avecindado. «Yo lo vi 12 años como alcalde, vi 50 familias con un baño, vi cómo abusaban de ellos en materia laboral, en las esquinas como comercio ambulante, ese comercio ambulante no es una persona con un paño, sino una persona usada por una mafia que los pone ahí y les cobra por estar ahí, vi niños encerrados con candado mientras sus padres salen a trabajar, lo vi», aseguró a dicho programa. «Es un drama humano que causa el gobierno venezolano, tenemos que administrar una realidad, es por eso que el plan de fortalecimiento tiene que ver con las fronteras, pero también con lo humanitario», expresó, asegurando que con el plan gubernamental «vamos a poder tener albergues transitorios, sanitarios y de primera acogida». Se trata de un trabajo conjunto con la Unicef, recordó. (Consignado por emol.com)