Después del 18/10/19, Chile ya no es el de antes, tal como el verso del Premio Nobel, Pablo Neruda, “nosotros los de entonces, ya no somos los mismos“ -Poema 20-. Chile cambió y nosotros cambiamos. De la noche a la mañana, la realidad nos aplastó. Tenemos que prepararnos para otro Chile.
Como gremio de trabajadores, vemos que el futuro ya no es más. Todos nuestros conocimientos han quedados obsoletos y, de hecho, con la cuarta revolución industrial, quedaremos todos cesantes y eso está al vuelta de la esquina.
Con la máxima preocupación, constatamos que mientras el resto de Chile está conectado globalmente “on line” y el surgimiento de las ventas vía e-commerce es una realidad que escala a una tasa anual del 30%, nosotros en Zona Franca, seguimos anclados en viejas prácticas que inevitablemente nos pasarán la cuenta. El gran Santiago de Chile nos coloniza.
Claramente, no estamos preparados para el inmenso desafío; la era digital, la cuarta revolución industrial y sobre todo al mundo de la Big Data con la inteligencia artificial a la cabeza. Todo eso nos sobrepasa.
El mundo del trabajo – hay que hacerse cargo – será cada vez más, menos físico, presencial y requerirá, incluso en los niveles más bajo y primarios de las empresas, grandes habilidades tecnológicas. Para allá vamos y nada lo puede detener.
“Cambia todo cambia”, era y es, el nombre de la canción popular, un himno del cantar latinoamericano, del compositor chileno, Julio Numhauser Navarro, que inmortalizó Mercedes Sosa y otros destacados cantantes, de los años ochenta y de fines del siglo anterior. Ahora podemos agregar que lo único permanente es el cambio y nosotros seguimos anclados en viejas prácticas del siglo XX, sin internalizar que estamos en el siglo XXI. Parece increíble, pero no tenemos una plataforma de comercio digital que agrupe toda nuestra oferta exportadora. Para peor, no podemos venderle a nadie vía e-commerce, no tenemos una ventanilla de servicios integrales en línea, tampoco firma electrónica y en fin carecemos de los usos más modernos que toda nuestra competencia ya viene usando por años. De hecho, nuestros principales clientes: Bolivia, Perú, Paraguay, vienen comprando masivamente en las macizas plataforma de “Amazon” “E-Bay“ “Aliexpress“ “Wish “ y otras tantas, que dominan el mercado comercial por medio de las redes sociales.
Hay que tomar nota. El mundo cambió, Chile cambió y nosotros nos quedamos en los noventa, haciendo de cuenta que nada ha cambiado.
Por todos estos motivos, hemos propuesto una agenda mínima de trabajo, de manera que Zofri S.A., asuma el compromiso en conciencia de la importancia inmensa de aggiornar la Zona Franca de Iquique y ponerla al día, en las mejores prácticas del comercio internacional. Por cierto, lo primero, es apurar el tranco en la inmensa brecha tecnológica, en segundo lugar, crear las condiciones, sociales, gremiales y empresariales, para derribar el muro que nos impide tener acceso al e-commerce; en tercer lugar, crear todo tipo de aplicaciones para facilitarle los negocios a nuestros clientes, por cierto, tener lucida conciencia que el gran desafío es la inteligencia artificial, la Big Data, en fin, levantarse y acortarse en las noches con la cuarta revolución industrial.
Pero claro, para dar ese paso, lo primero, es lo primero. Tenemos que saber, cuántos somos, que habilidades tenemos, cuántos somos hombres, cuántas son mujeres, que estudios tenemos, etcétera. En suma, necesitamos con “urgencia una encuesta de empleo Directo”, porque hasta ahora, todos repiten 36.000 empleos y nadie sabe de dónde sacaron la cifra, porque ¡Nunca¡ se ha hecho una encuesta laboral en Zofri¡
Además, necesitamos “otra encuesta seria para el Trabajo Indirecto”, que incluya todos los sectores de la zona franca: cargadores, taxistas, vendedores ambulantes, y una larga cadena de servicios, de pequeños emprendedores.
En esta cadena económica, necesitamos saber, ¿Cuál es el impacto regional y en la macro región de la actividad económica de Zona Franca? Hasta ahora ninguna Universidad se ha interesado en estos temas, lo cual constituye una gran vergüenza. De hecho no existen tesis de pregrado sobre Zona Franca, hasta donde nosotros sabemos del mundo académico en nuestra región. Perdonen la sinceridad.
En otra vertiente del debate sobre el futuro de Zofri, debemos discutir en voz alta el informe del Banco Mundial sobre Zofri. En muchos sentidos ese informe es lapidario con nuestra Zona Francas y sus datos y manejos estadísticos sobre los costos o daño fiscal, junto con ser alarmante es prejuicioso en las supuestas ventas a nuestra región y su relación con el contrabando. Ha pasado un año del informe y nadie ha dicho nada.
Para lograr los grandes cambios que anhelamos para Zona Franca de Iquique, no debemos olvidar que Zofri, es una construcción política con fines “económicos, éticos y sociales“, que dependen en un cien por ciento de su accionista principal, que es el Estado de Chile. Todo lo demás es “música sagrada”. De manera que dependemos básicamente del Ministerio de Hacienda y es al Ministro de esa cartera, al que debemos convencer, con una inmensa Data que somos “…xx cantidad de trabajadores”, con una composición muy heterogénea, que tenemos un gran impacto en la vida económica de la región, en toda la macro región. Ese impacto lo deberemos medir usando los indicadores más modernos, además, tenemos que demostrarle que las estimaciones del Banco Mundial son equivocadas respecto del “daño fiscal“ que producen las franquicias. Para todo eso, se necesita un gran equipo y disponer de medios económicos.
Por cierto este esfuerzo, es una tarea que se escapa por completo a las organizaciones sindicales de Zona Franca y debería ser asumida por Zofri S.A. En nuestra opinión, como administrador legal del sistema, en horabuena, tener una Data que le permita contar con amplia información, para tomar las mejores decisiones. Colateralmente a esta información, permitirá a las autoridades, definir las mejores políticas públicas, considerar materias de capacitación laboral en las nuevas competencias productivas, asimismo, agendar la innovación, entre sus labores de importancia inmediata, que hoy preocupan a nuestra sociedad y son parte mundo del trabajo.
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