Otro golpe a la cátedra, o mejor dicho, a la ciudadanía. Desde los medidores inteligentes ahora vamos al aumento de las tarifas eléctricas.
Desde este mes las tarifas eléctricas subirán en promedio un 10%, y otro tanto, a partir de julio, mes a contar del cual las tarifas podrían acumular un alza del 24% o más.
La explicación: el incremento del dólar y también la entrada de precios de aquellas licitaciones adjudicadas el 2014.
Recordar que los precios de licitaciones han bajado solamente a contar del año 2016 en adelante (producto de la relevante irrupción de la energía solar y eólica), pero esos mejores precios repercutirán en los precios de las tarifas a contar del año 2022.
Una vez más quisiera enfatizar que todos estos problemas desaparecerían en la medida de que los ciudadanos migráramos hacia sistemas autónomos descentralizados, mediante los cuales produzcamos nuestra propia energía.
Estimo que ha llegado la hora de que la ciudadanía se empodere, generando su propia electricidad y, de paso, colaborar en solucionar la problemática de la alta contaminación que las generadoras a petróleo y carbón, diariamente provocan.
Hoy, los países y las empresas, avanzan de la mano con las tecnologías renovables imperantes en el diseño e implementación de esquemas descentralizados.
Esto modificará el negocio, la ingeniería, la forma de producir, las tecnologías, el proceso de participación de la ciudadanía frente a estas inversiones y la forma de mantener el equipamiento.
En efecto, los ciudadanos podemos avanzar desde ya, haciendo un aporte real al objetivo particular de tener autonomía y prescindencia de la red.
Todo esto se puede conseguir mediante la instalación de sistemas energéticos renovables fotovoltaicos, eólicos, de biomasa u otros, que permitan gradualmente descolgarse de la red. En este sentido, los ciudadanos podemos tener un activo accionar.
Las comunidades también pueden acelerar este proceso, organizándose para la construcción de sistemas energéticos renovables, que autoabastezcan su demanda energética mediante el montaje de mini parques o huertas solares, al igual como debiera ocurrir con los poblados o caletas que hoy no disponen de electricidad.
En definitiva, la tecnología de energías renovables desarrollada por científicos e ingenieros, junto con su baja de precios, nos están permitiendo ser autónomos energéticamente.
La electricidad, en el corto plazo, puede estar en manos de la ciudadanía.
Hernán Cortez Baldassano, Ingeniero Civil