Con la llegada de la primavera y los cambios de temperatura surgen resfríos, alergias y molestias respiratorias de índole similar que son asociadas a la estación. Pero existe una que no es comentada de forma habitual, pese a su relevancia: el asma alérgica.
Esta es una variante del asma bronquial, la cual es desencadenada principalmente por la exposición a alérgenos como polen, ácaros del polvo, pelos de mascotas o moho, explica el Dr. Andrés Glasinovic, médico familiar y académico de la Facultad de Medicina de la Universidad de los Andes (Uandes).
La diferencia con el asma bronquial ‘no alérgica’ es que esta última puede activarse también por estrés, ejercicio, aire frío o infecciones, mientras que, “en el asma alérgica el sistema inmunológico reacciona exageradamente a los alergenos ambientales, provocando síntomas respiratorios”, indica el experto.
¿CÓMO IDENTIFICARLA?
El asma alérgica puede ser identificada con síntomas respiratorios como tos, sensación de obstrucción (pecho apretado), silbidos, carraspeo frecuente o falta de aire más de lo habitual, que empeora al estar en contacto con polvo, mascotas, polen o moho, dice Glasinovic.
Para ello, el académico es enfático en sostener que esta variante debe ser confirmada por un médico tras una evaluación clínica integral y exámenes.
No obstante, precisa que una persona que no tiene asma no puede padecer asma alérgica, ya que esta variante no es una enfermedad nueva. “El asma leve habitualmente está subdiagnosticada y la gente en general vive con síntomas de asma sin saber su diagnóstico, por eso se debe tener una alta sospecha a este diagnóstico ante síntomas sugerentes”, menciona.
TRATAMIENTO
El tratamiento del asma en su variante alérgica combina control de las alergias y manejo del asma bronquial habitual ante lo cual los pacientes requieren seguimiento médico para ajustar dosis de medicamentos, tener un plan ante crisis y actualizar estrategias si cambian los síntomas o exposición a alergenos.
Ahora, en los casos de asma grave o refractarios a tratamiento médico habitual, es recomendable que sean manejados por médicos especialistas broncopulmonares, dice Glasinovic.
Finalmente, el experto señala los implementos y acciones para tratar el asma alérgica. Esto son:
Medicamentos:
- Inhaladores broncodilatadores de rescate para crisis o exacerbaciones.
- Inhaladores de mantenimiento (corticoides) para reducir la inflamación bronquial.
- Antihistamínicos orales y/o corticoides inhalatorios.
No farmacológico:
- Evitar exposiciones a los alergenos que desencadenan síntomas.
- Mantener ambiente limpio y ventilar espacios cerrados.
- Evitar mascotas/animales que podrían desencadenar síntomas.