Hay descontento en Iquique porque se están viendo numerosas calles con basura, autos abandonados, plazas con juegos olvidadas, con cero mantenimiento; un paseo Playa Brava que nunca termina, tramos sin luminarias y semáforos apagados. Acerca de este panorama que perjudica a la comuna, el concejal Juan Lima Montero, señaló que los vecinos culpan a la Municipalidad y al Concejo Municipal.
“Sinceramente creo que hay una responsabilidad compartida. Nosotros somos fiscalizadores, hacemos ver las falencias, pero es la municipalidad la que debe ejecutar las tareas. Como todos sabemos, los municipios tienen diversos servicios, donde hay funcionarios que, supongo, tienen una planificación, coordinación y un programa de tareas a ejecutar. Hay encargados y personal de la IMI para ejecutarlos. Sin embargo, es el líder el que tienen que tener clara las prioridades y las quejas recaen sobre él y, de paso, recaen sobre el Concejo Municipal, quienes tenemos el rol de fiscalizar. Nosotros tenemos las sesiones para dar a conocer las molestias de los pobladores, pero hasta ahora nos escuchan, nos dan disculpas, toman notas y vemos que todo sigue igual”, manifestó el concejal UDI.
En efecto, hace un mes que el sistema de semáforos de avenida Pedro Prado con Los Molles.
“Esa intersección tiene una enorme afluencia vehicular, lo que significa riesgos para los peatones y los conductores. La demora demuestra que no hay repuestos, por lo tanto no hay mantenimiento, porque si lo hubiera la bodega del servicio que tiene que ver con este tema, tendría que tener los elementos para una reparación urgente, No es posible que se encarguen una vez que se dan cuenta que la falla es grande y los repuestos hay que encargarlos a Santiago, lo que es increíble ya que aquí tenemos zona franca. Sinceramente, creo que hay un problema serio en este tema. Lo peor es que no son los únicos semáforos malos”, comentó el concejal.
Consultado acerca de la consulta ciudadana para elegir el color de la fachada del Teatro Municipal, manifestó: “Preguntarle a la comunidad es correcto, el problema es que no sé qué porcentaje de los vecinos participará. Sé que se trata de un proyecto de casi 400 millones de pesos, que sirvió para restaurar sólo el frontis. A mí me hubiera gustado que empezaran desde el interior hacia fuera. Pero no ocurrió y esperamos que venga luego la restauración de este valioso patrimonio y que, además, es un enorme atractivo turístico.
Respecto a la Aduana, monumento nacional que data de 1871, que sufrió un incendio el 26 de febrero de 2015 y aún no se repara, señaló: “El Intendente Quezada junto a la subsecretaria de Bienes Nacionales, Alejandra Bravo, recorrió el edificio y sé que hay preocupación y que se hará un proyecto para repararla como corresponde a una edificación patrimonial y que espero que se convierta en un aporte cultural y turístico”, finalizó.
(La foto de esta nota fue captada esta mañana, después de las 08.00 horas, en calle Orella con Avenida Baquedano)