El control higiénico frente a esta crisis sanitaria, debe considerar a todas las personas, desde los afectados, sus familias, entorno cercano, y no excluye a las personas cuya actividad laboral implique proximidad y permanencia en un espacio delimitado y compartido, con personas que se hayan contagiado. En este sentido, es fundamental el uso correcto de elementos de protección personal y de barrera, que hayan sido definidos por la autoridad sanitaria, tales como: mascarillas, antiparras, guantes, entre otros.
El Coronavirus, que causa la COVID‑19, se transmite principalmente mediante las gotitas formadas cuando una persona infectada estornuda, tose, o exhala. Estas gotas de saliva o secreciones son pesadas para permanecer en el aire, y caen rápidamente sobre el suelo o las superficies, tales como mesones, escritorios, lugares de trabajo, utensilios de todo tipo, etc.
Actualmente, se desconoce exactamente el tiempo de persistencia y las condiciones que afectan la viabilidad del virus que produce la enfermedad COVID-19 en el medio ambiente. Algunos estudios que evalúan la estabilidad ambiental de otros coronavirus, estiman que el coronavirus que nos está afectando sobrevive varias horas en el medioambiente a temperatura ambiental en diversas superficies.
Es por ello, que las instalaciones y áreas potencialmente contaminadas con el virus que produce la enfermedad COVID-19 deben limpiarse permanentemente, utilizando productos que contengan agentes antimicrobianos, que cuenten con evidencia científica, que permita certificar su efectividad y a la vez seguridad para el medioambiente y las personas que los apliquen.
Es preciso destacar la necesidad de adoptar todas las medidas de seguridad necesarias antes, durante y después de ejecutar las actividades conducentes a la limpieza y desinfección de sitios potencialmente contaminados o contaminados con el virus que produce la enfermedad.
Fernando Torres
Director Escuela Química y Farmacia U. Andrés Bello