Aurora del Pilar Cayo Baltazar representó a Tarapacá en un conversatorio online sobre mujeres indígenas, emprendimiento y fortalecimiento de la cultura, organizado por el Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género en la Araucanía y Centro de Negocio especializado de Sercotec Inakeyu de la Comuna de Nueva Imperial.
En este contexto el trabajo colaborativo y las alianzas virtuosas Institucionales, las Direcciones Regionales SernamEG, Araucanía, Arica y Parinacota, Tarapacá, generaron una articulación con innovadoras de los pueblos Quechua y Aymara.
Aurora del Pilar Cayo Baltazar, dedicada al rubro a la Cocinera (Phayiri) tradicional Aymara y dueña de la banquetería andina “Qhantaturu”, tras gestión del Programa Mujer Emprende de SernamEG Tarapacá, fue seleccionada para exponer su cultura, tradiciones y experiencias de desarrollo laboral dentro de sus exitosos emprendimientos.
“Abordé el tema del microemprendimiento con pertinencia cultural sobre todo de mujeres, nuestro origen desde cero sin conocimientos, la forma de hacer negocios y cómo me fui fortaleciendo en el caminar del tiempo por medio de capacitaciones, en especial cuando hay mujeres indígenas en el Tamarugal muy expertas en manejar negocios”.
Sobre esto mismo, afirmó que “mi ponencia fue mostrar ese rol de muchas hermanas en la Precordillera, en el Altiplano y las que estamos insertar en la ciudad, sobre nuestro emprendimiento con identidad cultural”.
“En mi caso es la cocina, los sabores y hacer una banquetería andina, la cual inicié en el año 2009 por ahí, que en un principio era una idea inalcanzable pero me faltaban los conocimientos y herramientas. Yo veía muchos vídeos, televisión o cuando asistía a reuniones relacionada a pueblos originarios, no había una alimentación adecuada y con pertinencia. Entonces pensé en ese tiempo, porque no galletas de quínoa, jugos naturales de frutas del Interior, hiervas, maíz. Al principio no me consideraban pero fui persistente de darle un sello especial a la banquetería, desde la decoración de manteles, mesa y lozas con logo andino. Yo no trabajo con plástico porque quise darle ese sentido de no contaminar y nosotros hablamos mucho de cuidar a la madre tierra en los pueblos del Tamarugal. Por lo mismo, uso potes de cartón que son biodegradables y esa fue la experiencia como mujer aymara que presenté en representación de Tarapacá, además del premio en honor a Elena Caffarena que recibió en el 2009 por mi constante lucha por impulsar la cultura y motivar a otras hermanas”.
Agregó que “en el día de hoy eso me da mucha alegría porque veo a mis pares trabajando y desarrollándose mucho, ya que se difunden por las redes sociales y se crearon nuevas banqueterías, preparaciones con identidad y hablamos de patrimonio agroalimenticio de nuestros pueblos. Fue un orgullo ser parte del encuentro nacional y ser la voz de muchas mujeres de la región”.








