Señor Director: La historia nos da cuenta de innumerables episodios amorosos. Muchos cambiaron el curso de la historia. Es que el amor todo lo puede.
Algunos tomaron más color y pasión en obras literarias basadas en parejas que muchos prefirieron cambiar el nombre de los protagonistas para evitar las mazmorras. Es que siempre hubo y habrá restricciones y, a veces, es mejor prevenir que lamentar.
Sé que entre nuestros lectores hay muchos letrados, profundos conocedores de la historia que, como sabemos, se mira desde distintos puntos de vista, y han leídos de estas historias que llegaron, muchas de ellas, a la pantalla desde Hollywood para el mundo. Otras simplemente no llegaron, pero igual se conocieron porque siempre hay alguien que vio, escuchó y no supo guardar el secreto desencadenando episodios que era mejor olvidar por sus causas y efectos. Siempre hay más de dos adoloridos en cuerpo y alma/corazón.
De Eva y Adán sólo se dice que eran los únicos habitantes en lo que era un mundo que no conocimos. No se podía “pelar” a nadie porque no había nadie más. Y cuando se aburrieron de ser los únicos comieron del fruto del bien y el mal. Y ahí no hubo The End, sino el comienzo. Tampoco sabemos si se amaron o no y si fueron felices para siempre.
En el caso de la pareja Cleopatra y Marco Antonio, de acuerdo a lo que sabe, hubo amor y desamor, también culturas distintas y política en medio. No olvidemos lo que dijo Oscar Wilde: “El misterio del amor es mayor que el misterio de la muerte”. Y están los científicos que descubrieron que las hormonas son más fuertes que el amor.
Del pasado, que siempre nos parece lejano y fue ayer nomás, mencionaré algunas parejas que trascendieron y se pueden entretener si leen sobre estos romances que son más interesantes que ver farándula rasca: Beatrice Portinari con Dante Alighieri; Pedro I e Inés de Castro; Juana La Loca y Felipe El Hermoso; Mumtaz Mahal y Shah Vahan; París y Helena de Troya; Diana (Lady Di) y Dodi Al Fayed; John Lennon y Yoko Ono; Liu Guojiang y Xu Chaoqing; Salvador Dalí y Gala; Sissi de Baviera y Francisco José: amor y desafíos políticos; Oscar Wilde y Lord Alfred Douglas; Eduardo VIII y Wallis Simpson; Napoleón Bonaparte y Josefina de Beauharnais, cuyo nombre de nacimiento era Marie Josèphe Rose Tascher de la Pagerie; Liz Taylor y Richard Burton; Juan Domingo Perón y Eva Duarte (Evita). Y aquí, en Chile nuestra Miss Universo, Cecilia Bolocco y el Presidente de Argentina, Carlos Saúl Menem, Felipe Kast y Pamela Díaz y se ha comentado la historia de amor que desconocíamos hasta que apareció en algunos medios: Carolina Tohá y Mario Marcel. No se sabe aún en qué terminará esta historia porque recién comienza y solo la podría enredar la política que tiene más vericuetos que el laberinto del amor.
Rosalía Lourdes Andrade Y.