En redes sociales no todo es lo que parece. Detrás de los miles de retuits y la aparente masividad que muestran algunos candidatos presidenciales, gran parte de la conversación no surge de ciudadanos, sino de mecanismos automatizados que inflan artificialmente los mensajes.
Así lo revela el tercer informe Zoom Electoral: La campaña presidencial en redes sociales, elaborado por el Centro de Estudios de la Comunicación de la Facultad de Comunicación de la Universidad de los Andes, que analizó las cuentas en X que tienen comportamiento de bots vinculado a los hashtags de las campañas presidenciales.
Los datos sobre los hashtags fueron estudiados entre el 22 y 28 de septiembre, durante ese periodo de tiempo se detectó que el 94,8% de la conversación de #KastPresidente fue artificial, #JaraPresidenta (91,9%) y #EvelynPresidenta (89,2%) concentran los niveles más altos de tráfico no orgánico. En contraste, #ParisiPresidente (70,7%) y #KaiserPresidente (79,4%) exhiben una mayor fracción de conversación genuina, aunque igualmente minoritaria. (Ver gráfico adjunto).
“Esta diferencia revela que la masividad en redes sociales no siempre refleja un respaldo ciudadano auténtico, sino que responde en gran medida a estrategias de propaganda digital”, destaca el informe.
Para Óscar Jaramillo, investigador del Observatorio Desinformación (Chile) y coautor del estudio, el problema es que este tráfico artificial puede instalar temas en la agenda que no necesariamente representan las preocupaciones de la ciudadanía, “el principal problema del tráfico artificial es que infla y pone en circulación temas que no necesariamente son los que está hablando la ciudadanía. Esto genera una percepción de relevancia que puede no corresponder con las preocupaciones reales de los electores”.
Mientras que para Guillermo Bustamante, académico de la Facultad de Comunicación Uandes y coautor del estudio, señala que el espacio de conversación orgánica, aunque es más pequeño, tiene un valor estratégico para las campañas, “es la conversación genuina de los ciudadanos en torno a los hashtags presidenciales. Ahí se reflejan las preocupaciones reales de los electores, y por eso es donde los candidatos deberían poner mayor atención”.
El estudio concluye que, pese a las diferencias porcentuales, todos los candidatos muestran un patrón común: predominio del tráfico artificial por sobre el orgánico, lo que confirma que la popularidad digital no siempre equivale a apoyo ciudadano real.