- Hacer controles de salud periódicos permite detectar a tiempo una patología o la presencia de factores de riesgo.
Muchas de las enfermedades que van apareciendo durante nuestra vida están directamente relacionadas con los factores de riesgo a los que estamos expuestos, ya sean estos heredados o por la mantención de ciertos hábitos, como la falta de actividad física, fumar o no dormir las horas necesarias.
Respecto a la importancia de la prevención, la Dra. Luz Martínez, médico jefe de la Unidad de Medicina Preventiva de Clínica Universidad de los Andes, señala que “muchas veces el tratamiento o el buen control de los factores de riesgo permite prevenir varias patologías a la vez. Por ejemplo, el sedentarismo está relacionado con diabetes, hipertensión, infartos, accidentes vasculares, cánceres. Entonces, si se mantiene una vida con hábitos saludables, a largo plazo, se puede prevenir muchas de estas enfermedades”.
Algunos hábitos que la Dra. Martínez recomienda, para ir reduciendo los factores de riesgo, son:
- Mejorar la calidad de sueño
- Mantener una dieta equilibrada que incluya fibra, vegetales, frutas y alimentos integrales, además de disminuir los alimentos procesados
- Realizar actividad física de forma regular
- Aprender a manejar el estrés
- Hacerse chequeos preventivos con periodicidad
En cuanto a los chequeos preventivos que toda persona debiese realizarse, por tramo de edad, la especialista señala que “a toda edad se deben evaluar los factores de riesgo cardiovascular y los hábitos posibles de modificar. También hay exámenes específicos por edad, por ejemplo, las mujeres deben chequear desde los 25 años el PAP, que previene el cáncer cervicouterino; mientras que los hombres, el antígeno prostático desde los 40 años”.
Además, se indica a partir de los 40 años, la detección precoz de cáncer de colon y mama, junto con el chequeo de alteraciones del metabolismo y de la presión arterial.
“La detección temprana dice relación con encontrar una patología que ya partió y que todavía no ha dado molestias. En ese sentido, lo más probable es que el tratamiento permita disminuir, o mejor aún, evitar las complicaciones de esa enfermedad”, concluye la Dra. Luz Martínez.