Víctor Pérez, que enfrentó hoy una acusación constitucional que fue aprobada en la Cámara de Diputados, había llegado al cargo el 28 de julio pasado y como parte de una estrategia del Presidente Piñera por un «tercer tiempo».
Durante los 98 días que estuvo en la cartera, asumió hechos como el paro de camioneros y la violencia en La Araucanía. De cara a la votación del libelo en la Cámara Alta, Pérez aseguró: «Voy a ir al Senado como ciudadano sin que el Presidente tenga obstáculos». También dijo que no está «dispuesto que, a través de mi persona, se dañe al gobierno”.
Finalmente, renunció: «He tomado la decisión de dar un paso al costado», dijo el titular del Interior, asegurando que su salida fue aceptada por el Mandatario.
«Acabo de hablar con el Presidente y le hice llegar mi renuncia al cargo de ministro del Interior, puesto que no estoy dispuesto a que a través de mi personas se dañe al Gobierno. Aquí hay un ataque para obstaculizar la acción del Gobierno y, por lo tanto, no quiero que mi persona sea obstáculo». «Le planteé a él la voluntad de renunciar, a pesar de que trató de persuadirme, aceptó mis argumentos, porque claramente todos comprendemos a cabalidad que le propósito, el objetivo no es Víctor Pérez, sino que el Gobierno del Presidente Piñera», sostuvo.