El sacerdote Antonio Tapia fue el encargado de oficiar este miércoles 7, en el santuario de Tarapacá la Misa para Migrantes, Refugiados y Transportistas. En su mensaje pidió abrir el corazón para ser generosos y acoger a los migrantes, porque Jesús también fue un migrante que debió salir de Nazareth siendo un niño.
Mencionó que Jesús nos invita a seguirlo, tal como lo hizo Lorenzo que sufrió el martirio del fuego por su fe. “Ese camino que nos invita a seguir, para ser sus discípulos no es fácil, no es para un estatus social, ni tener riquezas, es para servirle”.
El sacerdote -que participa por primera vez en la festividad de San Lorenzo-preguntó a los feligreses si quieren seguir siendo discípulos, recibiendo al unísono un fuerte Sí. “Esa mis hermanos y hermanas es la gran motivación para estar un año más en Tarapacá. Estamos acá para seguir siendo discípulos de Jesús en las buenas y las malas”.
En la eucaristía recordó que Jesús hizo presente lo que está en las antiguas escrituras: hay que atender a los niños, extranjeros y las viudas. “Debemos orar por los hermanos extranjeros, migrantes, por la gente que hace transportes. Hay muchos extranjeros que sufren, se invitó a los hermanos venezolanos a iniciar una nueva vida en Chile, pero al llegar acá les cerraron la puerta. Europa cierra las fronteras a los africanos. Nosotros debemos seguir a Jesús, él también fue migrante debió abandonar su tierra siendo niño y se preocupó de los extranjeros. Oreos por el transportista que está en una movilidad constate, con el riesgo que eso con lleva. Hay que orar y preocuparnos por todos ellos”.
