En medio de las enormes dificultades que afligen a la población en la Región de Tarapacá, propias de la inseguridad pública, inmigración irregular, situación económica, desempleo y una inflación que no cesa, cargadores independientes de Zofri, resolvieron iniciar una demanda que mencionaba cierre forzado de las puertas de acceso al Recinto Amurallado, Mall y Edificio de Convenciones. Para contextualizar, haremos un recuento que grafica nuestra participación:
La Asociación Usuarios Zofri AG (AUZ) ha participado en la búsqueda de acuerdos para satisfacer demandas de los cargadores desde el movimiento del 8 de diciembre de 2016, en que éstos se obligaron a transformarse en empresas de carga y descarga, que los contrataría y daría estatus de trabajadores regulares y la sociedad Zona Franca de Iquique S.A. se obligó a no otorgar nuevas credenciales de cargador y poner término a las otorgadas a esa fecha. Despues de 4 años de tomados estos acuerdos solo los usuarios cumplieron con lo pactado, mientras los cargadores y la administración hasta hoy no cumplen, incluso, Zofri S.A. continuó otorgando credenciales para nuevos cargadores.
No obstante, la falta de cumplimiento de nuestra contraparte, con el ánimo de mantener las buenas relaciones, y habiendo cumplido nosotros con el aporte pactado, el 30 de septiembre de 2020, acordamos una extensión (Addendum) de este aporte por dos años, el que termina en febrero del año 2023.
Los cargadores que prestan servicios en el sistema reclaman compromisos adquiridos con ellos por el Gobierno Regional, es decir; en la Zona Franca no radicaba su problema y tampoco la solución definitiva. Sin embargo, nuevamente la solución intermedia que resuelve el conflicto nace de los aportes que entregan mensualmente los usuarios, esta vez ZOFRI S.A. que es la recaudadora, anticipará la entrega de recursos que correspondía entregar a fines del año 2022, para salvar la situación.
Sin desconocer el derecho que les asiste a los cargadores, lograr de la autoridad regional el cumplimiento de las obligaciones contraídas, la comunidad de usuarios se vio sorprendida por las características de esta determinación súbita de una acción de fuerza, de sindicatos o no, que desconocieron desde el inicio del conflicto, todos los derechos del resto de la comunidad de Zona Franca, en general, a trabajar en paz y con seguridad.
La Zofri es el lugar de trabajo de gran cantidad de personas, vendedores, contadores, bodegueros, secretarias, administrativos, usuarios y, también cargadores. Sin olvidar, la fuente de ingresos; los clientes. Ninguno de los demás integrantes de esta comunidad amenaza con paros que puedan dañar su fuente de trabajo.
*Darío Blanco, Gerente de la Asociación de Usuarios de la Zona Franca A.G. 1
