- En la búsqueda por lograr la meta de Cero Residuos a finales de la década, no solo han sido las acciones las que han cambiado al interior de Pronto Copec: también se ha transformado, día a día, la cultura de sostenibilidad que se vive siendo un trabajador de la empresa.
Cuando a Juan Quintana se le pregunta qué lo mueve frente al compromiso por la sostenibilidad en su trabajo como administrador de la tienda Pronto Costanera E0, su respuesta es simple: en su día a día, esta “se vive de forma concreta y comprometida”, donde “pequeñas acciones, sumadas, generan un impacto positivo”.
¿Qué significa trabajar en una empresa que busca ser Cero Residuos al 2029? ¿Cómo se siente ser parte de un modelo que transforma residuos en recursos, que recupera alimentos para donarlos, y que promueve una economía verdaderamente circular? Para los colaboradores y colaboradoras de Pronto Copec, esas preguntas se han ido respondiendo en el día a día, en cada jornada de trabajo, como señaló Quintana.
Una voz que ve de primera mano ese proceso es la de Sandy Díaz, maestra de cocina de Pronto Las Condes. “En nuestro día a día, junto a mi equipo, integramos la sostenibilidad como una forma de trabajo. Hoy más que nunca es clave asumir un compromiso real con el cuidado del medioambiente. Al mismo tiempo, hemos impulsado una cultura interna que promueve prácticas responsables, como el reciclaje y la formación continua en estos tema”, planteó.
Ese cambio en el modo de pensar, sin embargo, no ocurrió de la noche a la mañana. Así lo señaló María José López, gerenta de Crecimiento Estratégico y Sostenibilidad de Pronto Copec, quien dijo que “nuestra meta de sostenibilidad se vive en terreno, en cada tienda y con cada colaborador. Hemos aprendido que esta transformación no ocurre simplemente por un decreto interno, sino que se da cuando las personas hacen propia esta visión”.
Desde 2021, tras la Declaración de Cambio Climático de Copec, Pronto Copec decidió tomar el compromiso de avanzar hacia una operación más consciente con el medio ambiente, integrando, paso a paso, acciones de sostenibilidad en su red de más de 480 tiendas a lo largo del país. Uno de los ejemplos más potentes de esta transformación fue la implementación del piloto en la tienda Pedro Fontova, que alcanzó una tasa de desvío de residuos del 91 %.
Al tratarse de una marca con presencia nacional, el desafío ha sido técnico y cultural. Y la tarea ya está dando sus primeros resultados. Sandy lo ve en el área de cocina: “separamos los residuos en distintos contenedores y motivamos a todo el equipo a hacerlo bien. Gracias a ese esfuerzo, hemos logrado aumentar el porcentaje de reciclaje en nuestras tiendas”. Pero también, el cambio está presente en prácticas como el modelo de huevos más circulares, la donación de alimentos o el uso de vasos reutilizables y packaging compostable industrialmente.
Ese cambio en la mentalidad se ha convertido en objeto de orgullo de algunos colaboradores, como le ocurre a Juan Quintana. “Me enorgullece mucho cómo manejamos los residuos en nuestras tiendas, especialmente con el programa de reciclaje. Ver que tanto el equipo como los clientes se suman a separar los residuos me hace sentir que estamos generando un cambio real”, planteó.
En paralelo, Pronto Copec ha desarrollado alianzas como la que mantiene con Food for Future y Avícola Coliumo, la que ha permitido que los residuos orgánicos de las tiendas se transforman en proteína para alimentación animal. De ese modo, el proceso termina cerrando un ciclo de economía circular que hoy opera en 39 tiendas del país.
Adicionalmente, el 100 % de los envases son ahora reciclables o compostables industrialmente. En total, ya son más de 2.200 toneladas de residuos los que fueron gestionados en 2024, todo con foco en empujar una economía circular y mejorar el trabajo no solo en nuestra gestión en tiendas, sino que se convierta en el día a día de nuestro negocio.
“Todos los días se aprende algo nuevo, todos los días uno hace diferentes cosas y de verdad que es totalmente satisfactorio”, señaló Abraham Pineda, jefe de tienda de Pronto Hijiuelas. “Ahora estamos haciendo un compost, donde se procesa la comida y luego se convierte en tierra”
Otra arista de ese cambio cultural proviene de la alianza con Red de Alimentos, que se mantiene vigente desde 2020. Gracias a ella, se ha podido beneficiar a más de 117 mil personas a través de 584 organizaciones mediante la entrega de productos aptos para el consumo y evitar el desperdicio de alimentos.
En opinión de María José López, “lo más valioso de este proceso ha sido comprobar que las soluciones sostenibles no solo son viables, sino que generan orgullo interno y compromiso real entre los colaboradores de Pronto. Cuando el propósito se vive en carne propia, la sostenibilidad deja de ser una meta futura y se vuelve parte de nuestra identidad no mañana, sino que hoy”, cerró.