Señor Director:
Dos hechos ocurrieron en los últimos días en Iquique y Alto Hospicio, donde se vieron involucrados taxistas. Uno le enterró una antena a su pasajera y el otro le propinó un navajazo a quien lo había contratado. Los hechos tal como fueron deberá verificarlo la policía. Como hayan sido, son lamentables.
Sin embargo, no hay que meter en el mismo saco a todos los conductores que cumplen con este oficio. Hay algunos muy serios y responsables, pero hay otros que dejan mal al gremio. Prueba de esto son los acontecimientos registrados en días pasados.
La solución es muy sencilla. Hay un organismo que los debe fiscalizar. Es ahí donde hay que ser estrictos, rigurosos y exigentes. Después hay que salir a fiscalizar, reunirse con los diversos sindicatos. De lo contrario, seguirán ocurriendo estos casos. Entonces, mi llamado es a denunciar y a fiscalizar.
Rosita Pérez O.
cartasaldirector@elreporterodeiquique.com
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