miércoles, julio 30, 2025
No Result
Ver todos los resultados
Contacto
El Reportero de Iquique
  • Inicio
  • Noticias
  • Deportes
  • Salud
  • Entretenimiento
    • Cultura y Espectáculos
    • Gastronomía
    • Tecnología
  • Columnistas
  • Cartas
  • Arica – Antofagasta
  • Inicio
  • Noticias
  • Deportes
  • Salud
  • Entretenimiento
    • Cultura y Espectáculos
    • Gastronomía
    • Tecnología
  • Columnistas
  • Cartas
  • Arica – Antofagasta
No Result
Ver todos los resultados
El Reportero de Iquique
No Result
Ver todos los resultados

Un gustito, por Sonia Pereira Torrico

15 agosto, 2022
en Columnistas
Un gustito, por Sonia Pereira Torrico
Share on FacebookShare on Twitter

Mi abuela me relataba que después de la crisis del 30 y el éxodo pampino en la ciudad de Iquique, no existían comodidades, y en muchos casos, los niños andaban sin calzado. Una época de muchas carencias, falencias e incendios, no obstante, afirma que nunca faltaba la comida.

Los porotos, la leche, las carnes del matadero y el pescado era sagrado en la mesa familiar . Con amor guarda la imagen de su abuelito Miguel llegando de la caleta con dos suculentas cojinovas. El poroto lo regalaban, de ahí el dicho, es el plato de los pobres. «Puede faltar de todo , menos la comida» es una frase típica de las familias pampinas, una forma de darse un gustito en medio de la pobreza, una canción aprendida que evoluciona en años posteriores. 

En los 80, escuchaba detrás de las paredes, que mis papás se iban a dar un gustito, en el restorán «Misia Carmela» o el «Wagón» del sector El Morro. Mi tata exclamaba, realizar una serenata con la estudiantina «Voces del Norte» a mamá por el día de las madres. Mi tío Chuma tenía pensado llevarnos a fin de mes a comer a «pizzería D’alfredo» o al «café Diana». «Hay que darse un gustito» , decía papá recibiendo la quincena. Para el festival de Viña o la Teletón, pasaba a comprar un pollo asado al «Pollo Choro» ,con papas fritas más una coca cola de litro en botillería Kokoa de calle Gorostiaga. Si de celebrar cumpleaños se trataba, ir a cenar a un Chifa  es por antonomasia un clásico iquiqueño, también darse un gustito después del desfile disfrutando unos hot-dog en el  «Papy Bubu». El Disney de los niños era jugar en la casa de Tarzán o acampar en «Primeras Piedras» por dos semanas o un mes. Por otro lado, las generaciones más antiguas también se daban un gustito en «Almacenes Capella», «lomitos Maury» o en el «Gigi». El fin de semana, el gustito por ir a bailar se replicaba en «Don Sata», el  «Ragú» o el «Curupucho». El séptimo arte tenía lugar en el nacio, el coliche y el muni. Los más viejos se vestían de terno y corbata e iban a darse un gustito al «Dandalo», en la «Quinta de recreo»,  J.P  o algún tambo o malón de los recuerdos al ritmo del mambo de Perez Prado. Sin olvidar que al iquiqueño le gusta la buena pinta y el buen perfume; y este se las arreglaba en épocas de Arica, Puerto Libre y después con el olor a progreso o dólares en el puerto heroico. Sobran las excusas, sobran los motivos para darse un gustito, el chileno y en especial el iquiqueño se permite la licencia de autoregalarse en algún lugar del comercio , de entretención o bohemia iquiqueña. 

¿En que momento darse un gustito se transformó en un aprieto? El capitalismo cambió las necesidades y expandió los créditos de consumo, ya no nos conformamos con una cena o un par de zapatos. Deseamos viajar al extranjero, comprar el auto y celular del año. Rendimos culto a la marca extranjera y a la última selfie con un teenager influencer. Mis hijas me dicen que fulanito está marcando tendencia en las redes, yo no entiendo de eso, para mi tendencia, era la junta familiar de los días sábados en la casa de la abuelita Berta, donde conversábamos, nos mirábamos a los ojos y había contacto para reír en la sobremesa. 

Hoy por hoy,  la inflación aumentó en un 12,5 %, lo que ha generado un incremento del valor de productos esenciales. De acuerdo al INE, el aceite, el pollo, el plátano, la harina, el azúcar, el pan , la leche, los fideos y la carne han sufrido el mayor impacto en sus valores. Un anticucho este 18 de septiembre costará $8.000 mil pesos. Pero el chileno común y corriente tiene inserto en el ADN cultural, la frase » Hay que darse un gustito», y esta resuena como un programa de merecimiento del inconsciente y que de alguna manera hay que validarlo frente a cualquier contingencia, aunque esto signifique un mayor nivel de endeudamiento y stress en la dinámica familiar. Una relación de costo – beneficio casi perversa y normalizada en cientos de hogares, de los cuales el mío no ha estado exento. ¿Cómo cambiar este paradigma? y no seguir con el agua hasta el cuello, ¿por qué no cambiamos las vacaciones a Cancún, Punta Cana y el sur de Chile por vacacionar en la playa más cercana o quedarse simplemente en casa. ¿En qué momento, Chile se convirtió en un país arribista y aspiracional? 

La Pandemia evidenció este síntoma, donde la peste ya no es biológica sino moral (Albert Camus). Se agudizó con el aumento salvaje del parque automotriz, donde muchos ya no tienen cómo seguir pagando la próxima cuota.

Sonia Pereira Torrico 

Compartir
Siguiente
Mañana la JUNJI Tarapacá realizará simulacro de incendio en edificio de dirección regional

Mañana la JUNJI Tarapacá realizará simulacro de incendio en edificio de dirección regional


Indicadores Económicos

Miércoles 30 de Julio de 2025
  • UF: $39.184,08
  • Dólar: $970,09
  • Euro: $1.120,07
  • IPC: -0,40%
  • UTM: $68.923,00
  • IVP: $40.827,36
  • Imacec: 3,20%
  • TPM: 4,75%
  • Libra de Cobre: 4,42
  • Tasa de desempleo: 8,89%
  • Inicio
  • Noticias
  • Deportes
  • Salud
  • Entretenimiento
  • Columnistas
  • Cartas
  • Arica – Antofagasta
Info@elreporterodeiquique.com

© 2025 El Reportero de Iquique.

No Result
Ver todos los resultados
  • Inicio
  • Noticias
  • Deportes
  • Salud
  • Entretenimiento
    • Cultura y Espectáculos
    • Gastronomía
    • Tecnología
  • Columnistas
  • Cartas
  • Arica – Antofagasta

© 2025 El Reportero de Iquique.