El mal servicio de seguridad y otros, generan frustración e insatisfacción entre los clientes, trabajadores y usuarios en Zofri. Más que buscar a un culpable, lo importante para todos es saber cómo evitará la administración que esto continúe, ya que impacta directamente en las ventas del Centro Comercial, Recinto Amurallado y Barrio Industrial.
Suceden hechos de todo tipo, sin causa conocida algunos, como una fuga de gases o corte de energía sin que funcionen los respaldos a tiempo. También, robos ingresando a las empresas del Recinto Amurallado y Barrio Industrial, a locales mediante forados en el techo, robos de especies a vehículos de clientes en estacionamientos, robos y hurto hormiga casi a diario de grupos al interior del centro comercial, incluso forzando vitrinas, sin que lleguen los vigilantes a tiempo, y así, suma y sigue. La historia es larga y semi oculta, en el Mall en los últimos años, seis empresas que venden productos tecnológicos (teléfonos, tablet, teclados, otros) han sufrido robos millonarios.
De poco sirve tener más de quinientas cámaras y más de cien vigilantes privados si no logran prevenir, evitar, persuadir o inhibir los delitos. Si los locales y dependencias no cuentan con los estándares de seguridad necesarios, el cliente no se va a acercar y el usuario podría emigrar, es de la mayor gravedad.
La seguridad, debe entenderse como el nivel de aceptación de la existencia de riesgos y las medidas y medios que se adopten e implementen para enfrentarlos, de manera que se pueda alcanzar un cierto nivel de tranquilidad y confianza, luego de poner en práctica las acciones que permitan reducir los riesgos y, en consecuencia, los delitos.
Asimismo, una comunicación fluida, clara y proactiva con los usuarios es indispensable. Atender y resolver consultas y dudas, informar modificaciones y, sobre todo, ser transparentes en caso de errores o problemas, puede marcar la diferencia entre tener clientes, trabajadores y usuarios satisfechos o decepcionados.
Asociación Usuarios Zofri A.G.